
«No tenerle miedo al reto. No tenerle miedo al desafío». Fausto Valladares
CARLOS ARGUETA:
¿Cómo comenzó su inclinación por la carrera de comunicaciones?
FAUSTO VALLADARES:
Bueno, el interés por el periodismo, por la comunicación, nace en mí durante el terremoto de mil novecientos ochenta y seis, allá en el barrio Candelaria, desde mi propia realidad de damnificado, con mi familia. Vemos cómo los periodistas empiezan a cubrir la situación nuestra. Tenía dieciséis años. Y veo como el resultado de esa información, de esa comunicación, produce, posteriormente, la llegada de ayuda.
Ayuda de todo tipo, de alimentos, víveres. Para irla pasando, en ese momento. Entonces a partir de ahí, de esa realidad, y de cómo el periodismo puede ayudar a solventar problemáticas en la ciudadanía, es como nace en mí, ese intereses por contribuir, desde esa realidad, a paliar un poco la problemática de las personas. Eso me llevó a un momento en que la familia dice: “Mira, pero la carrera es muy peligrosa, la Universidad de El Salvador, etc.”. – “Sí, pero mi decisión es estudiar periodismo. Confiemos en que no va pasar nada. Yo quiero ser periodista para ayudarle a la gente, como periodista”. Y bueno, se desarrolla en un período también crítico para el país. Para todos era lo más cruento de la guerra en el país. Y quizá eso también llevaba a la familia a considerar el riesgo en que yo me ponía al ir a estudiar a la Universidad de El Salvador. Y después, consecuentemente ponerme en riesgo en el ejercicio del periodismo. Porque en ese momento nadie tenia claridad hacia donde iba el conflicto. Llegué a un momento en que, estudiando y llevando la carrera. Ejerciendo la carrera en los medios de comunicación a la par. Y aquí estamos gracias a Dios.
CARLOS ARGUETA:
O sea que a pesar de los riesgos y los peligros, se decidió por ejercer el periodismo, ¿refleja eso mucho de su personalidad decidida y un poco de audacia para hacer comunicación?
FAUSTO VALLADARES:
Si, siempre me he considerado una persona que asume riesgos, me gustan los riegos, con cierta cautela. La verdad es que si he sido una persona que ha asumido los riegos, los retos, los desafíos. Y eso, digamos que también ha construido en mí un tipo de personalidad profesional para ejercer la comunicación y el periodismo.
CARLOS ARGUETA:
Usted tuvo un paso por los medios informativos. Cuénteme un poco de esa experiencia en medios informativos en primera línea.
FAUSTO VALLADARES:
Pocas personas saben que mis primeras prácticas fueron en el diario Co- latino, Y mi primera visita fue al antiguo basurero en Soyapango, donde hoy es un asentamiento humano. Ahí me encontré a una señora que me decía, “tengo quince años de estar aquí y quince años tiene mi hijo. El aquí nació”.
Son cosas que a los veinte años, a uno lo golpean mucho, porque no hemos estado tan cerca de ese tipo de situaciones. Con el tiempo, pase a hacer prácticas a la radio YSU. Histórica en ese momento del país, porque tenia una cobertura bastante permanente del conflicto armado. Y posteriormente por situaciones que se dan de cambio en la radio, tomé ya una plaza. Me dieron una plaza como reportero. Entonces ya me cambio toda mi forma de ver la realidad, porque ya era un compromiso, ya profesional, con un salario. No era ya un estudiante más de periodismo, que pudiera ser o verse como, “ah, bueno, como no tiene un compromiso salarial, no le va interesar ejercer el periodismo”.
No, yo realice una labor profesional aún desde la misma práctica, tanto en el diario como en la radio. Luego, se da también la oportunidad y el saltó al canal doce, en el noticiero al día. Aprendí mucho de los camarógrafos, de los sonidistas, pues pasar de la radio a la televisión, no es lo mismo. Recibir teoría en la universidad, que vivir la realidad desde los medios. Así que yo tengo mucho que agradecerle a los camarógrafos y técnicos de sonido en mi propia formación profesional.
CARLOS ARGUETA:
Llama la atención el estilo de comunicación desde de la Defensoría, donde se desempeña un estilo de comunicación ín situ, de mucho contacto de la gente, de mucha contacto con la ciudadanía, con los consumidores. ¿Que lleva o que motiva ese estilo de comunicación?
FAUSTO VALLADARES:
Por la misma naturaleza de la Defensoría del Consumidor, en la comunicación no puedes poner una barrera con las personas a quienes nos debemos, sino todo lo contrario, abrir puertas y abrir ventanas, portones… Abrir todas las posibilidades de intercambio para escuchar y para responder como se debe a las personas consumidoras. En ese sentido, consideramos que todavía nos falta mucho por hacer. Tenemos tres años de ejercicio de la comunicación en la Defensoría, pero consideramos, que si hemos logrado bastante, falta mucho. Y nos ha también implicado tomar otras decisiones de como abrir más esa comunicación y como exponer más a la Defensoría. Cómo acercar el servicio a la ciudadanía consumidora.
Tratamos de orientarlos a la Defensoría en línea, que es una plataforma tecnológica, en el cual el usuario se registra, tiene un password, con un acceso propio y puede ingresar su denuncia, dar un aviso de infracción, darle seguimiento a su caso y tener toda la información, ahí en línea, directamente en la privacidad de su propia computadora.
Entoncesm, tenemos la Defensoría en línea, el Facebook, el twitter y el teléfono 910. Aparte de esos recursos se han implementado, en esta administración, las Defensorías móviles que es el desplazamiento territorial del personal receptor de denuncias, del personal que se encarga de la capacitaciones, de la educación al consumidor, de la vigilancia del mercado. Es decir, sacar la oficina a las calles.
CARLOS ARGUETA:
En el campo de la comunicación institucional, ¿si tocara evaluar, valorar las experiencias desarrolladas, cuáles podrían ser las lecciones aprendidas que valdría la pena trasladarle, contarle a otros comunicadores?
FAUSTO VALLADARES:
Quizás, primero, no tenerle miedo al reto, no tenerle miedo al desafío, a lo desconocido. Por ejemplo, meternos a las redes sociales, porque ahí nos está entrando mucha gente. Si bien uno puede decir, “no todos tienen acceso a redes sociales, porque le falta una computadora”. Si, pero también hoy los estudiantes tienen otros espacios donde tienen acceso a computadora. Estudiantes de bachillerato, universitarios y profesionales, es un mercado que está demandando respuesta de las instituciones. Yo no puedo comprender cómo una institución que brinde servicios no puede estar en ninguna red social. Es tanta la confianza y credibilidad que la Defensoría ha ganado en el twitter, que al twitter de la Defensoría llegan de todo tipo de quejas. La realidad es que la ciudadanía cada vez más se empodera de las tecnologías y nosotros como comunicadores podemos ser catalizadores e impulsores del uso también de esas herramientas para responder.
CARLOS ARGUETA:
¿Cómo puede la comunicación profesional, la comunicación como profesión, contribuir a una sociedad más justa, más humana, donde podemos ver el lado humano, el lado social de la comunicación?
FAUSTO VALLADARES:
Fácil porque el comunicador debe ser, de por sí, un profesional con vocación de servicio, con la suficiente sensibilidad humana para entender aquella problemática qué le afecta a una persona. Interpretar esa problemática y buscarle una solución apropiada a la realidad de esa persona. Un comunicador no puede ser insensible y ajeno a esa problemática.
Siempre un comunicador debe buscar el equilibrio, así sea que trabaje en una empresa, en una corporación empresarial. Siempre debe estar en función del beneficio de las mayorías, en beneficio de las personas.
Nosotros podemos contribuir desde nuestras responsabilidades, a empoderar a nuestros equipos. Yo soy una persona que prefiero enseñar lo poquito que he aprendido, y aprender lo mucho de lo que los demás me puedan dar a mi. Yo prefiero ser una esponja y salir de mi ignorancia en el momento y no vivir ignorante toda la vida. Yo siempre he manifestado a mis equipos de trabajo que me gusta empoderarlos, porque ellos van a ser mejores el día de mañana. Y yo voy a ser mejor todos los días aprendiendo de ellos.
CARLOS ARGUETA:
¿Usted tuvo una experiencia como docente?
FAUSTO VALLADARES:
Si, he podido ejercer la comunicación en las aulas, enseñando algunos conocimiento qué he podido aprender a lo largo de mi carrera. En la Universidad Centroamericana José Simón Cañas (UCA), fui invitado en varias ocasiones a impartir algunas catedras, un taller. Y lo he hecho con todo gusto. Como le digo, me ha gustado siempre compartirlo. Yo no tengo temor de que lo que le voy a enseñar a otra persona, esta persona lo va a usar en contra mía. Por que la verdad, que cada quien puede hacer su camino solito, con sus propias capacidades, con su propio aprendizaje y ganarse la credibilidad y confianza de sus superiores. Y lo otro importante, que lo aprendí también en el desarrollo de mi carrera, que sólo las personas que no hacen nada, no se equivocan; yo prefiero equivocarme y hacer bien las cosas, aprendiendo a partir de esos errores. Caerme y levantarme.
CARLOS ARGUETA:
Muchas gracias Fausto han sido conceptos y experiencias muy importantes que van a ser de mucho interés, de mucho valor para todos los comunicadores